Cuando te quedas embarazada la percepción
de ti misma y de tu entorno empieza a cambiar. En tus venas empiezan a fluir un
montón de hormonas diferentes que no tienes cuando no estás gestando, como por
ejemplo, la oxitocina, las endorfinas y la progesterona. La oxitocina, conocida
como la hormona del amor, genera una sensación de amor incondicional,
abriéndote a la vida y sintiéndote en plenitud. Las endorfinas te aportan
felicidad conectándote con el placer y el bienestar. Y la progesterona crea una
necesidad de recogida y mirada interior aportando relax y conexión contigo
misma. La combinación de todas hace que el embarazo pueda ser el momento de la
vida donde de manera natural estés en un estado de conexión excelente.
Una vez nace el bebé y habiendo vivido el estado mencionado, deseas mantenerlo y vivir desde él. Y lo que quieres para ti, lo quieres para los tuyos, para tu entorno, ...para la humanidad. Así, aspiras a un mundo mejor al que quieres contribuir y pertenecer, alineado a lo que es más importante para ti; a lo más esencial de la existencia. Un día, en una clase de yoga para madres y bebés, la Marta me comentaba que no le gustaría tener que decir a sus hijos que trabajaba para una multinacional, que preferiría poderles decir que trabajaba para hacer un mundo mejor, de acuerdo a sus valores. Para ella era muy importante el ecologismo.
Desde que estás embarazada, impulsada por el estado hormonal, suele ser muy normal empezar a cambiar hábitos más saludables: te alimentas mejor, empiezas a caminar, vas a la piscina, haces yoga, decides estar con la gente que te hace sentirte bien y buscas tiempo para ti y tu bebé, planteándote el horario laboral y, a veces, incluso el propio trabajo. En fin, que de manera natural tiendes a cambiar de estilo de vida, mejorándola y acercándote a tu esencia.
Carla, en su segunda maternidad, se dio cuenta que no podía continuar haciendo una hora de camino para ir al trabajo y otra para volver. Sentía que los trayectos en coche eran una pérdida de tiempo y que no podía continuar a ese ritmo. Así, luchó para poder tener una mejor conciliación familiar y trabajar desde casa todas las horas que le fueran posibles. En un estado de conexión excelente, inspirada por el mundo que deseas y sabiendo lo que más quieres, las prioridades te vienen dadas. Y cuando éstas son claras, optimizas el tiempo dándole el espacio a lo que es importante. Haciendo lo que realmente quieres, te sientes en plenitud, y eso, se nota en cómo te relacionas con tus hijas e hijos, pudiendo ofrecerles tiempo de calidad.
Te invitamos a que te apuntes al taller “De la Maternidad al Mundo” y disfrutar de los Beneficios que te aportará para vivir una maternidad y una vida consciente.
Facilitan:
Júlia Casals. Yoga en el embarazo y crianza consciente
Jonbi Belategi.
Coach Generativo
julia.c.o@hotmail.com
629536938
